San Ignacio de Loyola sigue vivo y palpitante en sus hijos y no existen fronteras ni razas en su carisma: prueba de ello son estos genios y verdaderos cíclopes que supieron pasar su vida En todo amando y sirviendo.
Este texto no solamente puede orientar nuevas vocaciones religio sas hacia la Compañía de Jesús, sino también alentar, consolidar y plani ficar a los que ya están «uncidos al carro de la mayor gloria de Dios».
DESCARGAR:
https://drive.google.com/open?id=1866OI1uYAcerckCw1ISsBgi0pJG9jcNp